A los 15 años, Dani Carnero ya había decidido que su futuro profesional estaría entre fogones. Comenzó a trabajar con Ignacio Muguruza, y un poco más adelante, a las órdenes de Berasategui. Una temporada con Manolo de la Osa y un año en El Bulli fueron sus últimos pasos antes de fundar La Cosmopolita, un local en pleno centro de Málaga autodefinido como ‘guiso-bar’, que se alza como un imprescindible de la gastronomía malagueña, precursor de Kaleja, la cocina donde Dani desarrolla su visión más vanguardista de la cocina de guisos tradicional, y de La Cosmo, donde busca un comensal joven, viajero y desenfadado.